El puerto de Acapulco, Guerrero, ha sido nuevamente azotado por un poderoso huracán en la temporada de 2024. En esta ocasión, el huracán John, de categoría 3, dejó grandes estragos en la región, recordando a la población los devastadores efectos del huracán Otis, ocurrido menos de un año antes. Las fuertes lluvias y vientos han provocado que muchas familias pierdan sus hogares, mientras los llamados de auxilio se multiplican en redes sociales.
Videos e imágenes difundidos muestran la magnitud de los daños, con viviendas destruidas y zonas completamente anegadas. Las fuertes corrientes de agua han arrasado barrios enteros, dejando a miles de personas sin patrimonio. Los desbordamientos de ríos y deslaves han agravado la situación, incrementando los riesgos para la población en Acapulco y sus alrededores. Las escenas compartidas evocan la destrucción que Otis causó en octubre de 2023, cuando el puerto fue severamente afectado.
El huracán John tocó tierra en Marquelia, Guerrero, a 150 kilómetros de Acapulco, el 24 de septiembre, con vientos de hasta 195 kilómetros por hora y rachas que alcanzaron los 220 km/h. Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la llegada de John ocurrió alrededor de las 21:15 horas, provocando lluvias torrenciales que desbordaron ríos, inundaron calles y carreteras, y dejaron a muchas comunidades incomunicadas.
La magnitud de los daños ha generado una gran movilización en redes sociales, donde los residentes de Acapulco han mostrado las graves pérdidas materiales. Automóviles sumergidos, calles convertidas en ríos y casas que fueron arrastradas por las corrientes son imágenes que recuerdan lo vivido en la tragedia de Otis. Las autoridades han comenzado a evaluar los daños y coordinar el envío de ayuda para las personas afectadas.
El huracán John no solo ha revivido los recuerdos dolorosos de Otis, sino que también ha dejado claro que la población de Guerrero enfrenta temporadas ciclónicas cada vez más intensas. Mientras las autoridades locales y federales trabajan en las labores de rescate y apoyo, los habitantes de Acapulco intentan sobreponerse a los estragos de un fenómeno que nuevamente pone a prueba la resiliencia de la región.