Economistas premiados destacan cómo instituciones afectan crecimiento y prosperidad

Daron Acemoglu, Simon Johnson y James A. Robinson han sido galardonados con el Premio Nobel de Ciencias Económicas por sus investigaciones sobre el rol de las instituciones en el desarrollo económico de los países. Según el comité del Nobel, su trabajo demuestra cómo los países con instituciones débiles y sistemas de justicia deficientes suelen enfrentar dificultades para lograr un crecimiento económico sostenible.

Acemoglu y Johnson, del MIT, y Robinson, de la Universidad de Chicago, han subrayado que la pobreza de ciertos países responde a problemas estructurales creados por el ser humano. Su obra ha explorado, entre otros ejemplos, la diferencia en calidad de vida entre las ciudades de Nogales, dividida entre México y Estados Unidos, para ilustrar el impacto de un sistema institucional robusto.

Acemoglu advierte que la democracia, aunque valiosa, no es una solución sencilla. Su trabajo también analiza casos de crecimiento en países autoritarios como China, y plantea que estos regímenes enfrentan desafíos para sostener la innovación a largo plazo, lo que destaca la importancia de las instituciones democráticas en la prosperidad.

Este galardón, formalmente llamado Premio del Banco de Suecia en Ciencias Económicas en Memoria de Alfred Nobel, destaca cada año a quienes avanzan la comprensión económica. Con este premio se concluyen los anuncios de los Nobel en 2024, que reconocieron también los logros en Medicina, Física, Química, Literatura y Paz.