El tifón Kajiki dejó al menos tres muertos, diez heridos y unas 10.000 viviendas dañadas tras su paso por el centro-norte de Vietnam, según informaron este martes las autoridades de Hanói. Las víctimas mortales se registraron en las provincias de Nghe An, Ninh Binh y Ha Tinh, esta última con el mayor número de lesionados.
El fenómeno meteorológico, catalogado como “muy fuerte y peligroso”, tocó tierra el lunes con vientos de hasta 150 kilómetros por hora. Aunque se debilitó rápidamente a depresión tropical, dejó a su paso intensas lluvias que provocaron inundaciones, corrimientos de tierra y el desbordamiento de varios ríos. Miles de familias quedaron sin agua ni electricidad, mientras que más de un millón de personas enfrentan interrupciones en servicios básicos.
Según los reportes oficiales, Kajiki derrumbó siete viviendas, dañó los techos de casi 7.000 y dejó anegadas más de 3.000. También arrasó con decenas de miles de hectáreas de cultivo, lo que supone un duro golpe para las comunidades agrícolas de la región. El mal tiempo obligó al cierre de aeropuertos en Ha Tinh y Quang Tri, afectando al menos 65 vuelos.
El Gobierno vietnamita desplegó 350.000 efectivos y más de 8.000 vehículos para apoyar en las labores de rescate y asistencia a la población. En China, la tormenta también impactó a más de 100.000 personas en la isla de Hainan antes de dirigirse a Laos y Tailandia. Las autoridades meteorológicas mantienen la alerta por lluvias intensas en el centro y norte de Vietnam hasta el miércoles.