La Presidenta de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California Sur, Charlene Ramos Hernández, reiteró su disposición al diálogo permanente, actitud que ha manifestado desde el primer momento de la toma ilegal de las instalaciones por parte un grupo personas trabajadoras y ex empleadas del Organismo, el pasado 8 de enero.
En este sentido, Ramos Hernández puntualizó que, los canales de comunicación de parte de la Presidencia han estado siempre abiertos tanto para las y los integrantes del Consejo Consultivo como para las personas que tienen tomadas las instalaciones, medios de comunicación y ciudadanía en general.
Asimismo, la Ombudsperson en el Estado destacó que, con el firme propósito de fortalecer los trabajos tendientes a la recuperación pacífica de las instalaciones y por segunda ocasión, convoco a sesión extraordinaria de Consejo Consultivo, reunión programada para el jueves 18 de enero a las 09:00 horas en una sede alternativa, derivado de la imposibilidad de sesionar en la oficina de Presidencia y de común acuerdo.
Al respecto, Charlene Ramos destacó que, la convocatoria a esta sesión fue enviada en tiempo y forma, de acuerdo a lo establecido en el artículo 7, 8 y 22 fracciones II y XXI; 23, 27 fracción VIII y XI, 30 y 30 BIS de la Ley de la CEDHBCS y demás aplicables.
En este sentido, la Presidenta de la CEDHBCS se dio cita en la sala de juntas de conocido hotel de la capital para el desarrollo de dicha sesión, sin embargo, ninguna persona integrante del Consejo Consultivo de la CEDHBCS se presentó.
La Ombudsperson lamentó que cuatro de cinco integrantes ciudadanos del Consejo Consultivo de la CEDHBCS hayan desestimado la convocatoria emitida y continúen con una actitud parcial, sin disposición al diálogo y obstaculizando la resolución expedita de esta lamentable situación.
Finalmente, la Presidenta del Organismo reiteró, una vez más, que continuará, en todo momento, accesible y abierta a la comunicación; asimismo instó a las y los integrantes del Consejo Consultivo a coadyuvar en la recuperación pacífica de las instalaciones para estar en posibilidad de continuar con el curso regular de las actividades institucionales y brindar la atención debida a la ciudadanía.