La Unión Europea condenó este domingo el asalto a la embajada de México en Ecuador para proceder al arresto del exvicepresidente Jorge Glas, quien se beneficiaba de asilo en esa representación diplomática.
En una escueta nota oficial, el portavoz de la UE destacó que el bloque “insiste en la importancia del respeto de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, de 1961”.
“La protección de la integridad de las misiones diplomáticas y de su personal es fundamental para preservar la estabilidad y el orden internacional, fomentando la cooperación y confianza entre naciones”, añadió.
La nota reforzó que la “vulneración de la inviolabilidad de los locales de una misión diplomática infringe la Convención de Viena y debe por tanto ser rechazada”.
Un hecho “muy grave”: Albares
El ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, consideró como “muy grave” la irrupción ecuatoriana en la legación.
En declaraciones a EFE, afirmó que “el respeto al derecho internacional es la base de la convivencia entre naciones. España exige el respeto de la inviolabilidad de las misiones diplomáticas”.
Asimismo, Albares ha señalado que “España siempre trabajará por el respeto del derecho internacional y las buenas relaciones entre los países de América Latina”.
Una clara violación de la ley internacional: Noruega
El gobierno de Noruega, que no es parte de la Unión Europea, pero sí de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA) condenó lo que llamó “una clara violación de la ley internacional”. En un comunicado, manifestó que “las sedes diplomáticas y el personal diplomático gozan de un estatuto especial en virtud de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961. Este estatus debe protegerse y respetarse”.
Frente a la crisis que se desató entre México y Ecuador, Noruega llamó “a las partes a que vuelvan al diálogo y resuelvan las crisis actuales basándose en las orgullosas tradiciones diplomáticas de ambos países”.
Irrupción en la embajada de México en Ecuador
En la noche del viernes, uniformados ecuatorianos fuertemente armados invadieron la embajada de México en Quito y procedieron a la detención de Glas, en un gesto que desató un verdadero temporal diplomático.
México anunció de inmediato la ruptura de las relaciones con Ecuador por el asalto a la embajada, e inició la operación para la retirada de todo su personal diplomático del territorio de ese país.
Este domingo, la cancillería de España también denunció la invasión armada de la embajada mexicana como “una violación de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas”.
Glas fue vicepresidente de Ecuador entre 2013 y 2018, durante el gobierno de Rafael Correa, y era requerido por la justicia por cargos de corrupción.
Alegando persecución judicial, Glas se refugiaba en la sede diplomática mexicana desde diciembre.
El sábado, la canciller Gabriela Sommerfeld justificó el asalto a la sede diplomática mexicana, argumentando que le operación se realizó “ante un riesgo real de fuga inminente” de Glas.