Los Cabos.- Baja California Sur es la segunda entidad en el país con mayor competitividad laboral, mientras que la Ciudad de México ocupa el primer lugar; Coahuila el tercer lugar, Nuevo León el cuarto y Querétaro el quinto lugar, de acuerdo al índice de competitividad estatal 2024 dado a conocer por el IMCO (Instituto Mexicano para la Competitividad).
Entre los indicadores más destacados está el ingreso laboral promedio, destacando que a nivel nacional aumentó el ingreso promedio que recibe un trabajador mexicano al pasar de 8 mil 707 pesos en el 2023 a 9 mil 828 pesos en el año 2024.
En el caso de Baja California Sur, reporta el IMCO que tiene un salario promedio para sus trabajadores de 14 mil 718 pesos, mientras que Chiapas tiene un salario promedio de apenas 6 mil 170 pesos, es decir, en esta entidad se paga 2.4 veces más el salario promedio que a los trabajadores de Chiapas.
En cuanto a la informalidad, mientras Coahuila presentó un nivel de informalidad equivalente al 34 por ciento de su población trabajadora, en Oaxaca ese porcentaje es del 82 por ciento una cifra significativamente mayor,
Mientras que en lo que a participación laboral de las mujeres, en Ciudad de México se presenta un porcentaje del 44 por ciento en comparación con Chiapas con solamente un 33 por ciento; mientras que las tres entidades con mayores perdidas en posición competitiva en el mercado laboral de acuerdo a la clasificación del IMCO está Colima con la pérdida de 5 lugares para ubicarse en el sitio 11; Aguascalientes con una pérdida de 3 posiciones y Yucatán también con 3 posiciones.
La medición establece que a medida que el efecto de la pandemia se disipa y con esto se incrementa la actividad económica y la movilidad, destaca el impacto en el subíndice de Infraestructura. En promedio las 32 entidades mejoraron en seis de ocho indicadores: telefonía móvil, acceso a internet, terminales punto de venta, uso de banca móvil, captación de ahorro y flujo de pasajeros aéreos.
En contraste, son evidentes las secuelas en el subíndice de Sociedad y Medio ambiente, donde el promedio de las 32 entidades empeoró en cinco de sus nueve indicadores: caudal tratado de aguas residuales, morbilidad por enfermedades respiratorias, cobertura educativa, mortalidad infantil y personal médico y de enfermería.