Malos hábitos y estrés elevan casos de infartos en México; alimentación saludable es clave

Por la Mtra. Monserrat Rodríguez León, directora de la carrera de Ciencias de la Nutrición de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG)

Cualquier momento es bueno para reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestro corazón que realiza su función sin descanso durante el día y la noche y es vital para nuestra vida.
Comúnmente, la gente suele tener el pensamiento que los problemas de corazón como los infartos únicamente le ocurren a adultos mayores, sin embargo, en México cada vez es más común que ocurra en adultos entre los 30 y 35 años, por lo que debemos tener en cuenta que cada vez aparecen en edades más tempranas, impulsados por malos hábitos alimenticios, poca o nula actividad física y estrés. Afortunadamente, es que gran parte de estos eventos se pueden prevenir y se puede comenzar por la alimentación.
El aguacate es parte de las comidas de los mexicanos y está presente en muchas variedades, desde siempre: en tacos, guacamole, ensaladas o, simplemente, se puede acompañar con una tortilla calientita. Lo que quizá no sabías es que este alimento tan mexicano es también un guardián de la salud del corazón.
La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) sugiere que mejorar los hábitos de alimentación puede reducir considerablemente el riesgo de infartos. Ahora los profesionales de la salud han identificado diferentes patrones alimentarios que benefician la salud del corazón como incrementar el consumo diario de frutas y verduras, cereales integrales, leguminosas, pescado y grasas saludables. Un ejemplo de ello es el aguacate, ya que investigaciones recientes han encontrado que quienes comen al menos dos porciones de aguacate a la semana tienen un menor riesgo de padecer enfermedades cardiacas.
Existen diferentes prácticas que dañan la salud del corazón como el alto consumo de embutidos, carnes procesadas, botanas altas en sodio y bebidas azucaradas, y esto hace estar en mayor riesgo de desarrollar hipertensión, elevar el colesterol y comenzar con acúmulo de grasa corporal, que se traduce en obesidad.
Algo importante a resaltar es que para cuidar tu corazón no necesitas tomar acciones extremas como dietas restrictivas ni prohibición al 100% de los alimentos, sino que es importante aprender a decidir mejor cada día. Comenzar a tener desayunos más saludables con diferentes grupos de alimentos y tratar de evitar el pan dulce todos los días de la semana, también puedes ofrecer agua natural como acompañamiento en la comida, en lugar de bebidas con alto contenido de azúcar.
En México, otro problema común que afecta la salud del corazón es el alto consumo de sodio, principalmente de productos industrializados como salsas, botanas, sopas instantáneas, entre otros, lo que conlleva al incremento de la presión arterial. Además, si dentro de la alimentación diaria se incluyen bebidas y productos azucarados, aparece el riesgo de padecer diabetes. La combinación de diabetes e hipertensión arterial incrementa considerablemente la posibilidad de sufrir algún infarto o derrame cerebral. Hoy es un buen momento de reducir el consumo de todos estos productos con la finalidad de cuidar aún más la salud de tu corazón.
Sumado a las recomendaciones de alimentación, también debe tomarse en cuenta que caminar al menos 30 minutos al día ayuda a mantenerse activo, mejorar la circulación y estar en mejor condición física y mental, porque esta práctica ayuda también a manejar de mejor manera el estrés de las actividades diarias.
Es importante que recuerdes que la prevención sí está al alcance de tus acciones, lamentablemente los infartos no dan sintomatología previa por lo que resulta indispensable comenzar a prevenir. Cuidar tu corazón es un acto de amor para ti y para tu familia, comienza hoy para tu salud de mañana.