- Aprender a pedir perdón o dar disculpas cuando fallamos, aceptar la ayuda de otros, saber agradecer, aceptar nuestras capacidades, solicitar ayuda es ser humilde
San José del Cabo.- En este mes de septiembre, Andrea Núñez gerente de Fundación Questro y la psicóloga Natalia Collins, a través del Programa de Valores en Micrófono Alto de Fundación Questro hablaron del valor de la humildad y la importancia de ésta en la vida diaria no solo de una persona sino de la colectividad.
Entre algunos de los beneficios de practicar la humildad, destacaron, mejorar la relación con un mismo, mejorar la autoestima, ser más objetivos, una buena comunicación que ayuda a mejorar las relaciones con los demás, fomentar una comunidad menos individualista.
Hicieron la reflexión de que “el mundo ahora nos lleva a ver por nosotros mismos, por eso se le resta importancia al valor de la humildad y es por eso su importancia para promover una mejor comunidad”.
“Desde que hacemos actos de conciencia sobre nuestra honestidad, comportamiento, cómo dignificamos la realidad de todas las personas, empezaremos a ser personas o comunidades más empáticas; un camino para llegar a la empatía es haciendo estos ejercicios de humildad y al final del día sentir mucha paz, tranquilidad y satisfacción”.
Esto es lo que más valor tiene, reconocer, lo hice lo mejor que pude, si tuve fallas pero también aciertos, eso es la humildad que lleva a otros valores como el respeto, la responsabilidad.
Sentirse en paz porque alguien fue honesto, de los mayores beneficios, ir a dormir para disfrutar un nuevo día, pero con paz interior.
“Todos los días podemos mejorar aspectos de nosotros y aprender de los demás con la finalidad de ser nuestra mejor versión”, la reflexión del programa.
También compartieron algunas prácticas para ser un poco más humildes: aprender a pedir perdón o dar disculpas cuando fallamos, aceptar la ayuda de otros, saber agradecer, aceptar nuestras capacidades solicitar ayuda.
La humildad viene del latín humus que significa tierra, está relacionado con tener los pies sobre la tierra, para la Real Academia Española significa conocer nuestras capacidades y aquello que nos limita, actuar de acuerdo con lo que sabemos que si tenemos, que si hacemos bien pero también de acuerdo con aquello que todavía nos hace falta trabajar.
El autoconocimiento es una clave esencial para la humildad. Ser humilde representa asumir la idea de que no somos perfectos que tenemos habilidades y cualidades pero también defectos pero debemos tratar de mejorar.