- En México sólo hay 13 playas incluyentes, de las cuales en Baja California Sur solo El Coromuel en La Paz, cuenta con accesos y rampas adecuadas para personas con discapacidad
- Propuso reformar la Fracción XI del artículo 33 la Ley Estatal para la Inclusión de las Personas con Discapacidad en el Estado
A fin de que se garantice la accesibilidad universal en la vía pública, lugares públicos de esparcimiento y playas, la diputada Paz Ochoa Amador (PRI) propuso reformas a la Ley Estatal para la Inclusión de las Personas con Discapacidad en el Estado, para que en cada municipio se adapte al menos una playa incluyente para el disfrute de las personas con discapacidad.
En sesión ordinaria, la legisladora presentó la propuesta para reformar la Fracción XI del artículo 33 de dicha ley, con el objetivo de establecer los canales de colaboración, para que en un acto de sensibilización, las diferentes esferas de gobierno logren que cada municipio de Baja California Sur, cuente cuando menos con una playa de este tipo, con lo que además de dar cumplimiento a la propia ley, estará abriendo sus posibilidades para posicionarse dentro de la oferta turística nacional e internacional como precursor del turismo accesible, incluyente y universal.
Refirió que en México sólo hay 13 playas incluyentes, de las cuales en Baja California Sur sólo El Coromuel en La Paz, cuenta con accesos y rampas adecuadas para personas con discapacidad, así como sillas anfibias para que éstas puedan disfrutar del agua y un paramédico salvavidas que se mantiene atento a cualquier circunstancia de seguridad.
Compartió que conjuntamente con algunas maestras de educación especial de Loreto ha iniciado la adaptación de una playa incluyente en Loreto y comprometió la gestión de recursos para su equipamiento.
Expuso que una playa incluyente es aquella que está adecuada y adaptada para que todas las personas, incluidas aquellas con discapacidad, en donde se cuentan con rampas de acceso, sillas de ruedas tipo anfibio que facilitan el desplazamiento por el mar, flotan en el agua y pueden integrarse una sombrilla, chalecos salvavidas, palapas, sanitarios y regaderas equipadas; señalización vial para personas con discapacidad visual; y personal capacitado para brindar seguridad y acompañar o auxiliar a las personas en caso de ser necesario.
Paz Ochoa hizo énfasis en que el mayor problema al que se enfrentan las personas con discapacidad, no son sus limitaciones, sino las limitaciones de accesibilidad del entorno físico, la falta de infraestructura adecuada que garantice su libre acceso como a cualquier otro ciudadano y todas aquellas actitudes y políticas públicas que limitan su derecho a la inclusión, al esparcimiento, a la diversión, al uso, goce y disfrute de los espacios recreativos ya sean públicos o privados.