- La adopción de tecnologías verdes forma parte de su compromiso con la responsabilidad social universitaria
- Mediante este proyecto, beneficiará a diferentes comunidades pecuarias locales
Un grupo de investigación de la Universidad Autónoma de Baja California Sur implementa actualmente un sistema de tratamiento de aguas residuales mediante biodigestores tubulares y humedales artificiales en el campus, tecnología que empieza a replicar en comunidades pecuarias del estado.
El tratamiento de aguas residuales es un servicio que consiste en la separación de la carga orgánica que contienen las aguas residuales, eliminando al máximo la cantidad de residuos y contaminantes.
De acuerdo con la profesora investigadora e integrante del proyecto, Dra. Deneb Peredo Mancilla, este proyecto surge en el marco de la Coordinación de Responsabilidad Social Universitaria y los programas de gestión ambiental implementados en las sedes universitarias.
Según señala la catedrática universitaria, el objetivo parte de buscar aquellas corrientes de residuos que se generan dentro de la universidad e implementar estrategias para disminuir al máximo su impacto en el ambiente.
Por una parte, la investigación se basa en estudiar los residuos propios que genera la UABCS, como los de las oficinas, así como los de origen acuícola generados en la unidad Pichilingue, en los propios laboratorios y Posta Zootécnica.
La Dra. Deneb Peredo detalló que la primera etapa del proyecto fue la instalación de cuatro biodigestores tubulares con una capacidad total de 55 metros cúbicos de biogás, un tipo de gas renovable que se obtiene a partir de los desechos orgánicos de la industria alimentaria, agrícola o ganadera.
Como antecedente, indicó que en Baja California Sur hay una cantidad importante de productores pecuarios, y en la mayoría de los casos no se efectúa ningún tipo de tratamiento, resultando prioritario para la Universidad trabajar en ello.
Esto llevó a instalar un laboratorio práctico en la posta pecuaria universitaria, donde hay 500 animales aproximadamente en su ocupación máxima, los cuales generan una alta capacidad de aguas residuales derivada de la excreta de orina y restos de alimentos.
“Todos los residuos que salen de los biodigestores tienen alto contenido nutricional, por lo que pueden servir como fertilizante. Todas esas aguas se mandan a un humedal, donde, por medio de plantas infiltradas, termina de hacer el proceso de descontaminación de los subproductos que salen y que permite generar este beneficio adicional de una laguna artificial”, destacó la profesora-investigadora.
Hizo hincapié en que este procedimiento no sólo evita un impacto negativo al medio ambiente, sino otorga un valor agregado por medio de la generación de un sustituto de gas natural, con el fin de ayudar a las comunidades pecuarias que no tienen acceso a la energía eléctrica. “Es decir, con los residuos de los animales puedan hacer un proceso de conversión para generar gas para cocinar, calefacción e iluminación”, agregó la investigadora.
Dio a conocer que este proyecto comenzó a principios de 2020 y en el momento actual se encuentra ya en la última etapa, que consiste en instalar biodigestores en comunidades pecuarias del estado, tales como el corredor de Santiago, Alarcón y Valle Perdido.
Dijo que es un proyecto interdisciplinario, donde participan investigadores del Departamento Académico de Ciencias de la Tierra, como la Dra. María Z. Flores y Dra. Karen Velázquez, experta en manejo del recurso hídrico.
En la parte social, está la Dra. Jacqueline Valenzuela, para medir estrategias y medición de tecnologías; y en lo que respecta a las energías renovables está encabezado por el Dr. Alfredo Bermúdez y Dr. Edwin Celaya.
La investigadora recalcó que la UABCS tiene como visión y misión el compromiso con la responsabilidad social universitaria, en este sentido, la investigación aporta a la generación de impactos positivos, principalmente al impulso del desarrollo sustentable en la entidad, en el país y en el mundo.
“Esta tecnología ayudará a tener un ambiente más sano y accesible a energías limpias, con el fin de mejorar sus procesos productivos y así aumentar su cadena de valores, además, de aumentar la presencia de la universidad en las comunidades del estado”, puntualizó la Dra. Peredo Mancilla.